3 Place Clemenceau, Sainte-Adresse, 76310 Le Havre
A pocos pasos de la playa, junto a las aguas cambiantes del Canal de la Mancha, el hotel La Petite Rade invita a una estancia donde el tiempo parece detenerse. Ubicado en Sainte-Adresse, a las puertas de Le Havre, este establecimiento ofrece un panorama impresionante desde el primer instante. El mar se extiende hasta donde alcanza la vista, y cada habitación, diseñada con un elegante espíritu marinero, propone una inmersión suave y relajante frente al movimiento del océano.
Al cruzar el umbral, se siente la sensación de embarcarse en un viaje único. El edificio, con líneas que evocan un transatlántico en escala, recibe a los huéspedes con una atmósfera cálida y animada. Tras tomar el ascensor, bastan unos pasos para llegar a la playa y disfrutar del simple placer de caminar junto al agua, en un aire salino y vivificante.
Las dieciséis habitaciones del hotel se distinguen por su refinada comodidad y su decoración inspirada en los grandes transatlánticos. Entre una modernidad discreta y un homenaje a la tradición marítima, crean un refugio propicio para la relajación. Los espacios, algunos de ellos con terraza o balcón privado, permiten que entre luz natural y ofrecen un diálogo constante con el mar.
Cada habitación está equipada con todo lo necesario para una estancia tranquila: ropa de cama de calidad, espacio de trabajo funcional, televisión por satélite, caja fuerte, Wi-Fi gratuito y bandeja de cortesía con té, café y dulces. Algunas habitaciones incluso cuentan con instalaciones adaptadas para personas con movilidad reducida, garantizando así una estancia sin restricciones para todos.
Por la mañana, el desayuno buffet, servido en la sala o en la privacidad de la habitación, acompaña los primeros rayos del sol sobre el estuario. Los productos frescos y locales se disfrutan al ritmo de los barcos que se deslizan lentamente hacia alta mar. Los fines de semana, el servicio se prolonga para permitir disfrutar más de este momento suspendido.
El Pub de La Petite Rade constituye un auténtico corazón palpitante. Abierto a todos, extiende el espíritu acogedor del hotel con una terraza panorámica justo sobre las olas. La carta combina tapas, hamburguesas, tablas de aperitivos, cervezas artesanales, vinos cuidadosamente seleccionados y cócteles inspirados. El ambiente alterna entre festivo y relajado, animado por conciertos en vivo, retransmisiones deportivas o happy hours regulares.
Para quienes deseen mantenerse activos, una sala de fitness permite extender la energía de los paseos por la playa. El Wi-Fi gratuito en todo el establecimiento acompaña a los huéspedes, ya sea que viajen por negocios o por placer. Un aparcamiento gratuito cercano completa las comodidades pensadas para facilitar la estancia.
Si bien la animación del Pub a veces da vida a las noches de fin de semana, la acogedora atmósfera y la amabilidad del equipo aseguran preservar el confort de todos. Siempre es posible expresar preferencias para disfrutar de una habitación más tranquila si se necesita.
La ubicación del hotel resulta ideal para descubrir los tesoros de Le Havre y la costa normanda. A solo unos minutos, los famosos Jardines Colgantes invitan a un paseo botánico sobre la ciudad, mientras que la iglesia de Saint-Joseph, obra maestra de Auguste Perret, impresiona con su audaz arquitectura y su luz interior.
A pie, es agradable pasear por el paseo marítimo, llegar al centro de la ciudad para explorar el museo de arte moderno André Malraux o detenerse frente a las galerías de artistas que animan el barrio de Saint-François. El centro reconstruido de Le Havre, incluido en el Patrimonio Mundial de la UNESCO, también merece una visita atenta por su singularidad.
En coche, los acantilados de Étretat ofrecen un espectáculo natural impresionante, a menos de treinta minutos de trayecto. Honfleur, con su viejo puerto y casas de entramado de madera, también es una escapada llena de encanto. Más lejos, Deauville y Trouville-sur-Mer seducen con sus playas míticas y su ambiente elegante.
Para los amantes de la gastronomía, varios restaurantes de calidad reciben a los visitantes no lejos del hotel. A pocos pasos, Le Grignot ofrece una cocina de mercado generosa, mientras que L’Adresse, en el corazón de Le Havre, combina productos frescos con inspiraciones contemporáneas. Más tradicional, Jean-Luc Tartarin, con estrella Michelin, sabrá conquistar los paladares más exigentes.
No se pierda tampoco visitar la Maison de l’Armateur, una inmersión única en la historia marítima de la ciudad, o planear una salida al Volcán, escena nacional emblemática diseñada por Oscar Niemeyer, donde espectáculos, conciertos y exposiciones marcan la vida cultural local.
Ya sea que venga para una escapada romántica, un paréntesis junto al mar en familia o un viaje de negocios con ganas de disfrutar de la costa, La Petite Rade en Le Havre le ofrece una experiencia sencilla, auténtica y revitalizante, con el mar como testigo en cada momento.
Actividades
General
Servicios
Restauración
Área de piscina y bienestar
Zonas comunes
Varios
Desde 71 EUR por noche